154
Mortificaciones habituales, acostumbradas: ¡sí!, pero no seas monomaníaco.
—No han de limitarse necesariamente a las mismas: lo constante, lo habitual, lo acostumbrado —sin acostumbramiento— debe ser el espíritu de mortificación.
Este punto en otro idioma
Documento imprimido desde https://escriva.org/es/forja/154/ (12/05/2024)